La importancia de la “chapita”

Chapita, placa, medalla, huesito, identificación, etc.…. Son nombres habituales pero lo que importa no es el nombre sino el hecho de que alberga información indispensable para poder recuperar un perro o gato en caso de extravío.

En la identificación debe constar información breve y concisa:

· Teléfono fijo
· Teléfono celular
· Nombre del animal
· De ser necesario colocar alguna leyenda “epiléptico” o “alérgico”.

Desde el momento en que nuestro perro o gato se extravía, prácticamente el destino que corra ya no depende de nosotros sino de la suerte y de la gente que se cruce por su camino.
Podremos colocar carteles en todos los barrios y repartir volantes a todo el mundo, pasar avisos por la radio, por televisión y hacer cadenas de mail. Pero, que vuelva o no lo decide quien encuentre al animal.

La identificación puede ser comprada en ferias artesanales y veterinarias y su precio oscila entre los $ 5 y los $ 30 dependiendo del material y del trabajo que lleve. También es cierto que no debe ser un elemento de ostentación ya que podría tentar a alguien a robarla con lo que quedaría nuestro perro en peligro. También podemos hacerla nosotros mismos con un llavero plástico de cerrajería reemplazando la débil argollita metálica con la que viene por un precinto plástico de los que se venden en la ferretería (para escribir dentro usar una birome que no se corra con el agua).

Recomiendo colocar el nombre como el animal lo oye habitualmente y no en la forma en que se escribe (“spike” se pronuncia “espaik”, si el perro se llama “Di Jay” podremos inscribir “diyei”).
Es una creencia popular (y será cierto también…) que si se coloca el nombre del animal pueden a uno robárselo para pedir recompensa por él. De hecho no estaría mal poner la palabra “recompensa” seria una forma más de promover su regreso. Es también cierto que, si nadie sabe como se llama mi perro, (flaco, negro, con una pata blanca y el pecho blanco, mediano y siempre sonriente) jamás adivinarían que se llama “Oso”.

Es también muy importante saber que es necesario tener la precaución de llevar al menos una identificación plástica extra cuando viajamos para ponerle en el collar cuando vamos de vacaciones con el nombre del animal, el teléfono local que podamos dejar de referencia, la dirección donde nos alojemos y el celular incluido el prefijo que haya que marcar.

Es por eso que debemos ser precavidos y demostrar cuanto los amamos colocándoles una identificación permanentemente.

Deben tener un collar resistente colocado de forma segura todo el tiempo, incluso cuando lo bañamos, esta comiendo, esta durmiendo, este jugando dentro o fuera de casa, estando nosotros o estando solo, todo el tiempo debe tener el collar con la identificación puesta.

Incluso gatos y perros que no salen de la casa con frecuencia son susceptibles de extraviarse y en estos casos la situación es peor porque además no están acostumbrados a moverse en la calle y son poco conocidos por los vecinos del barrio.

El extravío de un animal es un accidente y accidente es un hecho desagradable que ocurre imprevistamente.

Es un error decir: “le pongo cuando salimos pero ahora solo sale a hacer pis en el arbolito, va hasta la esquina y vuelve” porque de la puerta hasta la esquina pueden pasar accidentes. Un choque de coches, un tiroteo, un caño de escape, una bici que pasa por la vereda, o simplemente un encuentro con otro perro pueden ser accidentes que hagan que nuestro amigo corra, se asuste o se desoriente y se extravíe.

Muchos perros han vuelto a su hogar gracias a la “chapita”en su collar.

No podemos saber en que preciso momento
tu amigo mas querido puede extraviarse.
Más vale prevenir que curar… y es mas barato!!

Los voluntarios del Pasteur regalan identificaciones
los sábados y domingos de 15 a 17 hs.